martes, 28 de octubre de 2008

De mi. I


Empiezo una terapia de reconstrucción .
Una vez por semana hablo sobre mi a una desconocida. Me da que es demasiado tarde , no se si porque ya estoy reconstruida o porque hay cosas que no tienen arreglo, al final el resultado es el mismo.Soy la suma de lo que fuí
No me cuesta hablar de lo que recuerdo , ni siquiera hacer el esfuerzo de llenar los "años blancos", salvo en episodios muy concretos siento una indiferencia total por mi vida pasada.
Contesto con tranquilidad a las preguntas que me hace, puedo hablar sobre el odio, sobre el odio profundo de desear a alguien lo peor...
Sobre el egoismo extremo, hasta puedo hablar sobre la locura poniendole nombre y apellidos .
No se si he perdonado lo que un dia me parecieron grandes abandonos ni si perdonaron los mios , que tambien los hubo y recurro a la cinematografica frase de "no pudimos evitarlo" , eramos tan humanos, tan terriblemente humanos todos .....
Hablamos de mi vida de atras a adelante, sentamos a la mesa a una persona normal y hablamos de su vida que de pronto se ha convertido en algo interesantisimo, una vez por semana ponemos la moviola en marcha, solo nos faltan las palomitas de maiz.Siempre me acerca disimuladamente una caja de kleenex que no uso, toma muchas notas en folios blancos con un boli corriente, esa falta de artificios quizas forme parte del asunto, nada que pueda distraerme , naturalmente ella no sabe que a mi me llama la atencion tanto la ausencia como la presencia de los detalles ...
Arrancamos de una fecha clave ,febrero de 1987, le advierto que hay muchos años cerrados en vacio. No temo llenarlos , me dan igual , no tienen remedio, pero no me resistiré al intento de que se desmenucen en dias de 24 horas.

En febrero de 1987 cayó una nevada que hacia muy dificil atravesar la meseta...

10 comentarios:

Margot dijo...

Las nevadas cubriendo las mesetas son terribles. Tanto como la humanidad que casi nunca podemos evitar...

A mí no sé si me gustara reconstruirme, ummm... seguro que más de una pieza he perdido en el camino y haciéndolo caería en la cuenta, ays, eso duele, fijo!

Un saludo, Casilda.

Chico Dove dijo...

y hoy ... ¿que ha ocurrido hoy?

TORO SALVAJE dijo...

Si lo haces será porque confías aunque sea un poquito en que te vaya bien.

Ojalá sea así.

Yo no sé si me convendría reconstruirme, después del hostión que me di tampoco sería garantía de que no me volviera a ocurrir.

Ahora soy una especie de puzzle en construcción, veremos como quedaré, eso si lo acabo algún día.

Suerte.

Anónimo dijo...

Una nevada. Interesante inicio para el relato de una vida que se me antoja de lo más interesante.
Un beso.

TortugaBoba dijo...

En mi caso nevó cuando nací, y no creo que aquello fuese el principio de mis malestares.
Me ha llamado la atención la frase: "No se si he perdonado lo que un dia me parecieron grandes abandonos ". Es porque yo estoy en ello, perdonando lo que me han parecido grandes abandonos y que ahora me bloquean.
¿Sabes que siempre podrás pedir esos folios que garabatea ella cuando termines de ir a verla? Tienes 2 años legalmente para reclamarlos.
Qué cosas aprende una así porque sí...
Ánimo y habla, que ayuda. Y utiliza los kleenex aunque sea para pegar chicles, que se los dan de propaganda (es por hacerles gastos...).
Besooooo ♥

TortugaBoba dijo...

Casilda guapa, perdona que utilice este espacio para pedirte que me mandes un e-mail a mi dirección (la puse en el perfil), porque la tú tienes me da error :(
Beso.

zangolotino dijo...

Tu nevada, y un coche??

Umma1 dijo...

Qué mejor que escucharse a una misma, y descubrirse.

Que mejor que esa oreja, queno es más que un eco?

Las sorpresas me encantan, especialemente, cuando me hacen entender que las nevadas solo importan, de cuerdo a como yo me ls plantee.

También me encanta,encontrarme en los rincones insopechados. Por eso, sanamente te envidio ;)

Etèria dijo...

Me quedo con algo "Eramos tan humanos, tan terriblemente humanos todos..." A pesar de lo que fuiste y lo que eres sigues siendolo.

Besos

Unknown dijo...

Joe... aunque contaras las cosas más cotidianas, tal como hablas me gustaría estar en el lugar de la psicóloga... Cada sesión contigo debe ser de lo más prometedora